sábado, 17 de abril de 2010

Son las mismas calles pero, yo no soy, no soy la misma

Padre es verdad, nunca he escrito mucho sobre ti

Creo que se debe al hecho de que siempre has estado demasiado presente, Sin importar si estaba enojada, simulaba que no existías o simplemente quería olvidarte, pero siempre vuelvo, y sin ningún aviso, pero tu me conoces tan bien que nunca me saludas simplemente renuevas mi confianza y sin motivo, porque en realidad, las cosas no van muy bien, sin presiones porque tu amor verdaderamente no tiene límites, es difícil explicar cuando la mayoría de las personas argumenta tan sustancialmente sobre todo lo relacionado contigo, cuando el caos y la indiferencia consumen, y el dolor no abandona, mi experiencia es eso, algo sólo mío y como tal, nadie lo puede entender completamente, simplemente quiero transmitir algo de lo que tengo completa seguridad, no estamos solos y eso es lo mas difícil de asumir puesto que han sido siglos de independencia, de rechazo, de soberbia de perdida del camino, todos creen en sus teorías, que son tan variadas como personas en el mundo, exagero, no lo creo, cuanto tendremos que destruir, o a cuantos metros estaremos del precipicio para ver que no existe, tan solo, es el peso de las estructuras que no tienen base, porque olvidamos la esencia. Creo que a mi me toca la cobardía, has querido ayudarme a superarla, pero ya sabes lo de siempre, cada día es comenzar de cero, y eso es, el cero siempre ha estado ahí.

No hay comentarios: